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Utilización de Champú Especial: Usa un champú diseñado específicamente para gatos, ya que los productos para humanos pueden ser demasiado fuertes y causar irritación en la piel de tu mascota.
Evitar el Estrés: Mantén la calma y habla con tu gato en voz suave para tranquilizarlo durante el baño. Evita levantar la voz o forcejear con él, ya que esto solo aumentará su ansiedad.
Secado Cuidadoso: Después del baño, sécalo cuidadosamente con una toalla suave y evita el uso de secadores de pelo que puedan asustarlo.
Reforzamiento Positivo: Recompensa a tu gato con golosinas o elogios después del baño para asociar la experiencia con algo positivo.
Con paciencia y una actitud tranquila, puedes hacer que el baño sea una experiencia más llevadera tanto para ti como para tu gato.
