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Presta atención a la madurez: Almacena las frutas y verduras maduras en la parte delantera del cajón de la nevera para recordarte consumirlas primero y evitar que se echen a perder.
Controla la humedad: Algunas frutas y verduras, como las hojas verdes, necesitan niveles de humedad más altos para mantener su frescura. Utiliza bolsas de plástico perforadas o contenedores con tapa para mantener la humedad en el interior.
Siguiendo estos consejos, podrás mantener tus frutas y verduras frescas y sabrosas durante más tiempo, reduciendo el desperdicio de alimentos y ahorrando dinero.
